Ante el creciente interés por la imagen y el físico, son muchas las personas que deciden someterse a tratamientos o retoques estéticos sin presentar ninguna patología. Como consecuencia, la demanda de profesionales especializados en medicina estética ha aumentado considerablemente en los últimos años, por lo que muchos profesionales deciden ampliar su formación académica previa hacia este ámbito. Ahora bien, ¿qué tratamientos pueden aplicarse al estudiar medicina estética? ¿Están todos los profesionales habilitados para ello? En el post de hoy resolvemos algunas de las preguntas frecuentes sobre la formación en medicina estética.
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¿Qué es la medicina estética?
En primer lugar, debes saber que la medicina estética es una rama sanitaria dedicada a la promoción y la restauración de la belleza, la estética y la salud facial y corporal, tanto en hombres como mujeres. Esta disciplina utiliza metodologías médicas de intervención menor, pues solo se emplea anestesia tópica o local y en régimen ambulatorio.
En caso de aplicarse cirugía mayor y anestesia general, estaremos hablando de otra disciplina: la cirugía estética. Esta práctica se dedica a la corrección y reconstrucción de defectos funcionales derivados, por ejemplo, de un accidente de tráfico o una enfermedad.
Así pues, el cometido de la medicina estética es ejercer la medicina preventiva, pues al mejorar el aspecto físico del paciente, su bienestar y salud en general aumentan.
Tratamientos más demandados en medicina estética
Actualmente son muchos los tratamientos estéticos corporales o de rejuvenecimiento facial que tenemos a nuestro alcance. Y cuando hablamos de medicina estética, estos son algunos de los más demandados:
- Ácido hialurónico. Es el relleno facial de moda, pues hidrata y corrige imperfecciones, como son las arrugas y líneas de expresión. Sus efectos suelen durar entre uno y dos años.
- Botox. También conocida como toxina botulínica, es una sustancia que se inyecta en el área muscular frontal, convirtiendo en pasivos los músculos activos del rostro.
- Hilos tensores. También se conocen como hilos mágicos y se colocan debajo de la piel. Estos filamentos reabsorbibles estimulan el colágeno y aportan un efecto tensor, disminuyendo las arrugas.
- Criolipolisis. Se suministra frío de forma controlada en aquellas zonas donde hay grasa localizada, consiguiendo reducirla.
- Carboxiterapia. Consiste en inyectar CO2 para dilatar los vasos sanguíneos y oxigenar la capa superior de la piel. Con ello, se eliminan las toxinas que aportan un aspecto de cansancio en el rostro, como son las ojeras.
¿Quién puede aplicar rellenos faciales al estudiar medicina estética?
En Latinoamérica, la medicina estética se considera una práctica médica, por lo que solo están autorizados para ejercerla los profesionales médicos. Por ejemplo, en Chile están autorizados los médicos cirujanos especializados en estética y/o dermatología.
Asimismo, en México están autorizados los dermatólogos, los médicos especializados en estética o los cirujanos plásticos. O en Perú, la Ley Nº 31014 establece que la aplicación de sustancias modelantes o de relleno están limitadas a los especialistas en cirugía plástica y dermatología.
Así pues, la regulación estricta de este sector se debe a las responsabilidades legales, la dificultad de las técnicas utilizadas y el tratamiento de los problemas estéticos en sí. Y es que una mala praxis puede provocar serios problemas de salud.
¿Por qué estudiar medicina estética en Esneca?
Disfrutar de una buena calidad de vida implica tener salud y estar a gusto con nuestro cuerpo. Es por ello por lo que estudiar la maestría en medicina estética de Esneca permite ampliar conocimientos en tratamientos estéticos que, a modo de medicina preventiva, reducen aquellas pequeñas imperfecciones que nos provocan un aspecto poco saludable.
Cabe destacar que la medicina estética abarca diferentes áreas, pues trabaja en la causa de varios problemas. A través de esta disciplina se consigue un abordaje integral del paciente, pudiendo mejorar su aspecto físico desde diferentes ámbitos, como es la reeducación de hábitos y rutinas, cuidados para la piel, etc. Además, es un sector en constante evolución, por lo que cada vez más integra técnicas que complementan y mejoran el aspecto de los pacientes de forma segura.
Finalmente, se trata de un campo profesional con una gran demanda, por lo que especializarse en esta área implica asegurarse un futuro profesional estable.